En los últimos años cada vez es más popular el aceite de coco gracias a sus múltiples utilidades empezando por la cocina hasta el mundo estético, y con el pasar de los años dicha popularidad no hace más que aumentar.
Uno de los grandes atractivos del aceite de coco es que se obtiene sin procesos químicos. La pulpa de la fruta se prensa para liberar el aceite por lo que la sustancia conserva todas sus propiedades. Gracias a ello puede utilizarse en múltiples áreas sin efectos adversos o con riesgos. Esto lo hace un producto muy atractivo en el contexto de un mercado actual donde crece la cantidad de consumidores preocupados por su salud.
¿Cuáles son los beneficios del aceite de coco para la salud?
El consumo del aceite de coco, puesto que es un producto natural, aumenta las defensas y protege al organismo de enfermedades gracias a que fortalece el sistema inmune. También mejora la circulación al eliminar el colesterol malo. Es por esto por lo que la sangre circula mejor favoreciendo la salud de los órganos que interactúan en el cuerpo.
El aceite de coco también posee grasas saturadas que tienen propiedades antimicrobianas que ayudan a combatir bacterias que suelen provocar problemas en el estómago. Adicionalmente, se ha demostrado que el aceite de coco contribuye a una buena digestión. Otros estudios sugieren que este producto favorece la reducción de la grasa abdominal al tiempo que contribuye a mejorar el metabolismo ayudando a absorber mejor los nutrientes de las comidas y desechar las grasas que no se necesita.
Ventajas del aceite de coco en el mundo de la estética
El aceite de coco también tiene múltiples ventajas en el cuidado de la piel y el cabello. Con relación a la piel mejora su aspecto y actúa como un antioxidante gracias a que contiene vitamina B y E, elementos claves en la regeneración de la dermis. Por otra parte, contribuye a restablecer el PH neutro, así que es ideal para pieles sensibles.
El aceite de coco también es recomendado para el uso en el cabello ya que ayuda a combatir la resequedad del cuero cabelludo debido a sus propiedades hidratantes. Tiene un efecto revitalizante, reparador, aporta suavidad y brillo, y protege la fibra capilar al tiempo que evita las roturas del cabello.
