Las tarjetas de crédito pueden ser un arma de doble filo. Si bien para algunas personas son una gran ayuda financiera debido a la comodidad y flexibilidad que brindan a la hora de adquirir productos, también se pueden convertir en una pesadilla si no se las sabe manejar con precaución.
Las tarjetas de crédito permiten realizar grandes compras, tomar vacaciones con la familia y comprar en línea, pero sin un plan claro para afrontar la deuda puede generar graves dificultades financieras.
Si bien hay algunos productos y servicios que es conveniente comprar o pagar con plástico, existen otros que es recomendable no hacerlo. Si desea tener éxito y mantener sus finanzas al día, debe conocer cómo usar las tarjetas de crédito de una manera que sea adecuada para que la administración de su dinero sea estable.
¿En qué no debemos usar la tarjeta de crédito?
Al utilizar la tarjeta de crédito en compras de todo tipo, se podría estar afectando la liquidez sin notarlo. Esto quiere decir que al momento de la suma de todos los gastos el resultado sea un alto monto por pagar, que quizás no se pueda cubrir. Es por esto que es fundamental tener cuidado con su uso y, tratar de no pagar con ella en las siguientes situaciones:
Pagos de otras deudas: no se recomienda utilizar la tarjeta de crédito para pagar deudas en otros bancos, ya que en realidad solo transferirá sus deudas y a la larga tendrá más intereses.
Compras diarias: las famosas ‘compras hormiga’ como el mercado, gasolina o un café a la pasada no se deben hacer con la tarjeta de crédito, ya que harán que sus deudas se vayan acumulando, ocasionando intereses por compras de valores pequeños que no merecen tal complicación.
Joyas y lujos innecesarios: a todo el mundo le gustan los lujos, al menos de vez en cuando. Adquirir una deuda con tarjeta de crédito por productos como joyas o accesorios de valor muy elevado, harán que a largo plazo surjan complicaciones por los altos intereses que se deberán pagar.
Compras impulsivas: quizás las más difíciles de controlar. Es normal salir a dar una vuelta, ver algo que nos atrae y querer comprarlo. Y si se cuenta con una tarjeta de crédito, peor aún. Antes de realizar una compra de este estilo, siempre pregúntese si realmente necesita ese producto o si puede ponerse en ese gasto en ese momento. No compre por impulso.
Cuotas escolares: adquirir deudas con la tarjeta de crédito por el pago de la educación de sus hijos es una mala decisión. Existen otro tipo de opciones mucho más convenientes como entidades bancarias especializadas en este tipo de préstamos, que brindan facilidades de pago mucho mejores que las que ofrecen las tarjetas.
Hobbies costosos: siempre es mejor comprar de contado este tipo de pasatiempos de alto costo, ya que los intereses de la tarjeta irán a largo plazo y se acumularán con otras compras. No importa cuáles son las mejores tarjetas de crédito en México, este es un asunto que es preferible descartar de antemano.
Buenos hábitos para el uso de las tarjetas de crédito
Cuando se usan correctamente, las tarjetas de crédito son una herramienta útil no solo para fraccionar los gastos, sino que si siempre realiza los pagos a tiempo, se puede construir un buen historial crediticio. Además de pagar en tiempo y forma, hay otros buenos hábitos de crédito a tener en cuenta:
Siempre tratar de pagar más que el pago mínimo.
Si es posible, pagar el saldo completo todos los meses.
Siempre revisar los estados de cuenta mensuales de su tarjeta de crédito para asegurarse de reconocer todas las transacciones.
Llamar a la entidad emisora de las tarjetas periódicamente para negociar tasas de interés más bajas, especialmente si el puntaje de crédito ha mejorado desde que se ha abierto la cuenta.
Tener en cuenta estos puntos es fundamental, ya que si se empeza a remplazar el efectivo por la tarjeta en cada compra que se realice, se puede caer en serios problemas que van a afectarnos en aspectos que quizás no estemos contemplando, incluso, en la salud. Una persona que está endeudada empieza también a atravesar una angustia porque el dinero no alcanza, ya que en ocasiones debe destinar el 100 % al pago de las deudas.
Además, recuerda que siempre debes elegir la tarjeta de crédito que se adecúe a tus necesidades. No todas son iguales y no todas te ofrecerán lo que estás buscando. Infórmate bien, asesórate con expertos y seguro encontrarás la tarjeta ideal para ti que te permita acceder al nivel de vida que deseas sin excederte.