La industria láctea ha sido una de las más afectadas por la implementación de los octógonos en México. Los octógonos son etiquetas de advertencia que se colocan en los productos con alto contenido de azúcar, grasas saturadas, sodio y calorías, con el objetivo de informar al consumidor sobre el contenido nutricional del producto.
La industria láctea comienza la reformulación
Ante la implementación de esta medida, la industria láctea ha comenzado a reformular sus productos para evitar la necesidad de colocar los octógonos. La reformulación consiste en modificar la receta del producto, reduciendo el contenido de azúcar, grasas saturadas, sodio y calorías, para cumplir con los límites establecidos por la normativa.
La reformulación de productos lácteos no es un proceso sencillo, ya que la leche y sus derivados son productos muy complejos desde el punto de vista nutricional y tecnológico. Sin embargo, la industria láctea ha logrado reducir el contenido de azúcar, grasas y sodio en sus productos, manteniendo su calidad y sabor.
Entre los productos que han sido reformulados se encuentran la leche, los yogures, los quesos y los helados. En el caso de la leche, se ha reducido el contenido de grasa en la leche entera y se ha aumentado el contenido de calcio en la leche descremada.
En el caso de los yogures, se ha reducido el contenido de azúcar y se ha aumentado el contenido de proteína. En el caso de los quesos, se ha reducido el contenido de grasas saturadas y sodio. En el caso de los helados, se ha reducido el contenido de grasa y azúcar.
Además de la reformulación de productos, la industria láctea también ha implementado medidas para promover hábitos alimentarios saludables. Algunas empresas han lanzado campañas de concientización sobre la importancia de una alimentación balanceada y han desarrollado programas de educación nutricional para sus consumidores.
Los detractores de los octógonos
La reformulación de productos lácteos es una estrategia que ha permitido a la industria láctea cumplir con la normativa de los octógonos y al mismo tiempo continuar ofreciendo productos de calidad y sabor. Sin embargo, la implementación de esta medida ha generado un debate sobre la efectividad de los octógonos como medida para combatir la obesidad y las enfermedades relacionadas con la alimentación.
Por un lado, los defensores de los octógonos argumentan que esta medida es necesaria para informar al consumidor sobre el contenido nutricional de los productos y fomentar hábitos alimentarios saludables. Por otro lado, los críticos argumentan que los octógonos son una medida simplista que no aborda las causas subyacentes de la obesidad y que no tienen en cuenta la complejidad de la alimentación y la nutrición.