Con el regreso progresivo a los encuentros presenciales es necesario aumentar las defensas del organismo. Y para lograrlo no hay nada mejor que un delicioso jugo casero, y es que es una de las formas más simples y rápidas de garantizar esa dosis de salud diaria.
Peligro ante la baja de defensas
Cuando nuestras defensas están bajas estamos expuestos a enfermedades e infecciones por virus o bacterias especialmente de índole respiratorio. Hay síntomas que nos pueden alertar de que nuestro sistema inmunológico está suprimido, entre algunas están:
- Resfriados difíciles de curar y frecuentes: y no se trata de un resfriado común, en algunos casos el cuadro infeccioso empeora en gran manera.
- Cansancio o agotamiento extremo: se puede ver reflejado incluso ante actividades de poco esfuerzo físico.
- Caída del cabello: si bien es cierto también puede deberse a otras razones, al tener bajas las defensas sufrimos de la pérdida del cabello.
- Manchas en la piel: pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo.
- Mala cicatrización.
En algunos casos se puede experimentar alguno o todos estos síntomas al mismo tiempo. Por lo que es necesario estar alerta ante cualquier síntoma que indique que nuestras defensas están bajas.
Lo natural siempre es la mejor opción
Es válido que sepas que el jugo casero para la inmunidad juega un papel importante a la hora de cuidarnos. Además, son una fuente rica de antioxidantes que aportan muchos beneficios para la salud.
Por lo que te mostraremos las tres opciones que puedes incluir a partir de ahora en tu rutina diaria y fortalecer tus defensas. Los beneficios de cada jugo varían según los elementos que lo componen, sin embargo, estas tres opciones tienen en común ricos nutrientes, minerales y compuestos bioactivos.
- Zanahoria, remolacha y naranja: debido a estos componentes es excelente para tratar la gripe, resfriados y problemas respiratorios como el asma y la bronquitis. Además de ayudar a prevenir la anemia y el envejecimiento prematuro.
- Manzana, limón y jengibre: es una excelente fuente de vitamina C y antioxidantes, por lo que ayudan en la producción de glóbulos blancos.
- Aguacate, papaya y avena: es una excelente opción para empezar el día. Concentra la vitamina A y C junto con el Zinc y el selenio, sin olvidar las grasas buenas que contiene el aguacate.
Aunado a estas tres opciones de bebidas, expertos en inmunología recomiendan otras actividades para fortalecer las defensas. Entre las que encontramos dormir de siete a ocho horas al día, realizar ejercicio físico con frecuencia, mantener una buena rutina de higiene y limpieza, tener una dieta balanceada que incluya frutas, verduras, granos y proteínas. Y por supuesto si aún con todas estas ayudas naturales persiste el problema siempre la mejor opción será visitar a tu doctor.