El pasado 27 de junio el primer capítulo de una serie en estreno abordó la historia sobre el caníbal de Atizapán, una serie documental llamada “Caníbal Indignación Total” que narra la problemática del feminicidio en México. Una horrible historia contada por las autoridades cuando revisaron la vivienda de este peligroso hombre.
El caníbal de Atizapán
En el primer capítulo de la serie, narra cómo fue que las autoridades capturaron y encontraron el domicilio del caníbal de Atizapán. Los funcionarios narraron la primera escena que vivieron al llegar a la vivienda de Mendoza, un nuevo abominable caníbal que mantenía el resto de sus víctimas en un refrigerador.
También describen que encontraron sangre en un sartén preparado con chile y otras especies. Por si fuera poco, describieron que encontraron machetes, cuchillos y sangre en los muebles además de maquillaje y ropa de sus víctimas. Tras su captura confesó que había comido carne de sus víctimas.
Este documental del caníbal de Atizapán forma parte de un proyecto de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en un intento por concientizar a la comunidad acerca de los feminicidios en México. El presidente de la Suprema Corte la Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, expresó que “todas y todos tenemos que verla para reflexionar juntos y así cambiar nuestro país”, dijo a través de un video difundido a través de su cuenta de Twitter.
Aparte de las cuestiones éticas y morales ¿Qué tan malo es el canibalismo?
Por supuesto que el canibalismo es una práctica que atenta contra las cuestiones éticas y morales que existen en la sociedad. Sin embargo, desde otros aspectos también es contraproducente, por ejemplo, desde el punto de vista nutricional comernos los unos a los otros no es lo más adecuado.
La carne humana es una fuente de calorías sorprendentemente baja en comparación con otras carnes rojas. Según ciertos estudios el músculo humano contiene aproximadamente 1,300 calorías por KG eso es mucho menos que la carne de res y nada en comparación con la del jabalí o la del oso.
Por otra parte, otro gran peligro del canibalismo son los priones, una versión anormal de una proteína que ha tenido una alteración en su forma que además de perder su función se vuelve infecciosa convirtiendo otras proteínas sanas en priones, realizando una reacción en cadena. Al consumir carne humana con priones hay probabilidad de contraer infecciones. Sea como sea la horrible historia del caníbal de Atizapán ilustra los graves problemas de feminicidio en el país.